Durante mi niñez, solía disfrutar los días lluviosos. Fui de aquellos que encontraba placer en bañarme en la lluvia, acompañado de muchos vecinos que tenían igual sano disfrute, donde la edad no era impedimento, porque había adultos, jóvenes y niños en tal goce colectivo. Es de mis recuerdos bonitos.
Pero, también recuerdo cuando la gente solía comentar que el agua de lluvia era muy beneficiosa para las plantas ¿Será cierto?.